Thursday, July 18, 2013

El Grupo Literario Namul se ha forjado solo...

Un texto de Josué Vallejos, 
miembro activo del Grupo Literario Namul,
leído el 28 de setiembre en el 14 aniversario del grupo


Hace 14 años Guadalupe cuenta con una organización cultural, que la fundara Robert Jara Vélez; y, le pusiera por nombre Grupo Literario Namul. Desde entonces es la institución cultural más importante del medio y es el único en el Valle Jequetepeque que sigue unido y se hace fuerte con la labor de sus integrantes, después de catorce años sigue unido y se hace fuerte con la labor de sus integrantes.

El Grupo Literario Namul se ha forjado solo, ha nacido y ha crecido entre nosotros (los guadalupanos), no es una institución improvisada que quiere actuar con aires de grandeza como aquellos que acaban de nacer y creen que ya lo han conseguido todo o todo está a sus pies, no. El Grupo Literario Namul ha ido ganando terreno en los niños, jóvenes y adultos de nuestra ciudad con esmero, con perseverancia, con sacrificio; sufriendo el proceso, ensayo – error, hasta mejorar su arte en pro de la identidad cultural de todos los guadalupanos. Hoy somos una institución que contribuye culturalmente a la grandeza no sólo de nuestro pueblo, sino también a la grandeza de nuestra patria, pues Guadalupe es el Perú.

Pertenezco al Grupo Literario Namul desde sus orígenes (año 1997); y es para mí la escuela o la casa taller donde he aprendido realmente a trabajar la palabra burda hasta convertirla en arte, siempre en continua interacción con mis hermanos namulianos: Robert Jara y Miguel Arbildo. Definitivamente, Namul significa mi superación personal como escritor; hacer a un lado la mediocridad y seguir el camino de la perfección literaria.


Esto ha requerido perseverancia en la lectura de los maestros de la Literatura, el conocimiento y práctica de las técnicas literarias, así como la investigación propiamente dicha, pues hoy en día los creadores literarios no están sujetos sólo a la inspiración, sino más bien a la investigación. De manera que no podemos confundir y llamar a todo lo que aparece escrito en un libro cualquiera, obra literaria. Debemos tener el mínimo conocimiento literario para poder defender una verdadera obra literaria.